Segunda parte de La Gran Depresión

Viendo los lateros programas de entrevistas políticas, mal ocupando el único día libre, me enteré del detalle decisivo que me terminó de helar el alma: La purga (así la calificó acertadamente la panelista de derecha en Estado Nacional) se realizó, literalmente, como reza la frase, entre gallos y medianoche.   Como NO tomé notas, debido a que creía que ellos nada nuevo aportarían y NO tengo conexión internet para revisar los podcast del que lo tenga, las referencias a ellos son de memoria, por lo que carecen de exactitud y sólo podré parafrasear la idea principal.

Ya suponía que había sido un espúreo Comité ad hoc, especie de tribunal popular de linchamiento a lo Korea del NOrte (mientras perdemos tiempo en esto, allá se está decidiendo La Historia: Las bombas serán lanzadas, al tiempo que acá siguen muriendo niños Sename, pero ya pasó de moda hablar de eso), cosa que confirmó el mismo ex presidenciable, al decir que fue comunicado en su casa a medianoche de que un comité que él desconocía, NO de que debería comparecer ante él, sino que la sentencia ya había sido dictada en ausencia del acusado.   Hay varios abogados en dicha Fuerza Armada y ¿¡nadie siquiera pensó en que debía ser notificado del juicio político que se le iba a formar en contra, para presentarse y hacer sus descargos!?   Lo juzgaron como si estuviese en rebeldía, cuando todo fue una vil trampa.   Insisto, un vil montaje (NO faltó la comparación con la legendaria radio Kioto, ojalá se resuelva como esa vez, en que el afectado ha sido el único presidente de su conglomerado de gatos de campo)   Eso ya es algo innegable, el proceso por el cual perdieron todo el capital político que tenían, encarnar la última esperanza en una nueva política, su eslogan para posicionarse independientemente de la Nueva Pillería.

Ahí me caí de poto, a pesar de estar sentado en el pobre colchón que tanto ha soportado mi decadente cuerpo.   Yo los llamaba Fuerza Armada de broma (por lo pasado de moda, como dije antes), pero la Realidad superó mi peor presentimiento: La verticalidad del Mando es total y el secretismo para las decisiones hace a este poder aún más oscuro de lo que imaginé.  ¿Pero cómo mierda estos pendejos de mierda se creen mejores que la DesConcertación y la Derecha si están aplicando el mismo sistema de los tribunales militares que simplemente mandaban al patíbulo sin el bendito debido proceso?   Dios mío, ¡pero qué mierda!    Mi peor pesadilla se había hecho realidad: Hemos vuelto a la Dictadura por otros medios, parafraseando a Von Clausewitz.

El profesor de Historia de Estado Nacional (también hablador hasta por los codos con un alto volumen de voz, en lo cual también me declaro culpable), llegó a la misma conclusión antes expuesta: Esto va más allá del cupo, se trata de una diferencia en la visión de mundo.   Al ver expuesta la idea base, se me quitaron las ganas de publicar mi anterior artículo, dado que se basaba en la misma idea general, pero el mecanismo por el cual fue expulsado del conglomerado, ya que lo inhabilitaba para siempre de toda elección en todo Chile, fue la gota que rebalsó el vaso.

¿Ud., estimado lector, creerá que el vendedor ambulante que me tomó media hora hacer reflexionar un poco y casi me cuesta una paliza, volverá a votar por dicho conglomerado?   Había olvidado al otro líder de opinión que logré hacer reflexionar: un vendedor de helados que habla con muchos micreros, porque está anclado a un paradero muy concurrido.   Esas personas, que NO atienden a razones políticas ni de Estado ni nada que se le parezca, esas personas que dieron el triunfo a Sharp en Valparaíso, NO van a votar por este fracasado conglomerado de gatos universitarios.   El sólo hecho de que se peleen por un cupo a la Cámara de los intrascendentes nos da náuseas.

Si algo aprendí del fracaso del 2011 es que los universitarios se hicieron odiar en el Mercado Cardonal, acá en Valparaíso, porque les quemaron un contenedor de basura y cada vez que hacían una marcha, ellos perdían la mercadería del día, al quedar rociada con el polvo lacrimógeno.   Ese año hablé con la mitad de los locatarios y sólo uno se cuadraba con ellos.   Casi la mitad me manda a la mierda por preguntarles, otros NO estaban de acuerdo con sus ideas, un tercer grupo dijo entenderlos, pero NO compartía sus métodos, pero tampoco estaban de acuerdo con la gratuidad, dado que eso los haría flojos.   Ahí me di cuenta que lógica de Mercado y la privatización de todo, ha moldeado de tal manera la mente de la gente que es parte de su credo fundamental.   Cualquier cosa que suene a Estado, lo rechazan de plano, sin siquiera abrirse a un posible debate.   El argumento de todo cuesta en la vida y hay que esforzarse (sinónimo de tener que pagarse uno mismo todo) son las piedras basales, debido, precisamente, a que ellos se identifican como gente de esfuerzo.   Sólo uno de los que dijo entenderlos, pero rechazar sus métodos, dijo que la gratuidad se justificaba si devolvían al país lo recibido con un servicio también gratuito.   Estas visiones son extrapolables a toda la población, aunque NO tengan validez estadística, debido a que opiniones del mismo tipo he oído en diferentes ámbitos no relacionados con dicho espacio urbano.   De tanto ser repetida la idea de que lo estatal es malo y lo privado es bueno, la gente se lo ha creído totalmente.    Hasta la mentira más descabellada es creída por la gente si es repetida durante décadas.   Goebbels tenía razón con eso de la repetición, es más, estaría contento con esta Nueva Fuerza Armada, creo que hasta se afiliaría a Revolución Democrática y armaría su Comité de Propaganda y popularizaría el ¡Heil, Giorgio!   Creo que el fiscal militar Torres pediría formar parte del Comité de Linchamiento.

También en aquella ocasión, una persona se me acercó a decirme que me fuera, porque habían varios que querían golpearme por hacer tantas preguntas, ya que creían que era un infiltrado de la PDI, cuyo cuartel está al lado de dicho Mercado.

Una cosa son los errores por inexperiencia de perro nuevo, pero un accionar premeditado para anular moralmente a una persona que hasta hace unas semanas fue su pre candidato presidencial, porque la sentencia era un veto perpetuo, en la práctica, una expulsión y, por el mecanismo ocupado, tal como dijo esa panelista, una purga.   El oír esa palabra en televisión me heló, porque yo había usado esa idea, expulsión y exilio, usando el símil del régimen estalinista, exagerando la nota, para dejar en claro el alcance de dicha acción.   A saber la trama de ella, me di cuenta que mi imagen didáctica NO era una exageración, sino la más pura de las verdades.

Utilicé la expresión anular moralmente, porque la utilizó Boric en Tolerancia Cero, al clarificar su diferencia con la Desconcertación, diciendo que NO era moral, sino política, dado que si era moral, se anula al otro, impidiendo toda conversación–negociación.   Si eso NO lo va a hacer con la Desconcertación, dado que sí o sí tendrá que sentarse a negociar su apoyo en segunda vuelta, dado que la BEA nunca tuvo opción alguna de pasar la primera (eso de estarse inflando, como ya lo he dicho, les está costando caro), ¿por qué sí lo hicieron con su, insisto, ex precandidato presidencial?

El cargo por el cual lo vetaron en todo Chile indefinidamente, la sentencia NO especifica la duración de la pena (otro error imbécil de estos malos abogados metidos a malos políticos), NO es un cargo político, sino MORAL: Haber agredido verbalmente a una mujer por su condición de mujer.   Es decir, el peor cargo dentro de lo políticamente correcto: Violencia de Género.   Que el panel de Estado Nacional dijese unánimemente que NO había habido tal violencia de género fue de antología y hasta la panelista de derecha le dio el beneficio de la duda a la BEA de haber decidido sin haber escuchado los famosos audios.   A esa altura del programa, pensé, la Bea babea.   Me pasó algo similar hace unos años: Al Meo, lo m…  La misma suerte le espera.   Nada nuevo bajo el Sol, dijo Salomón.   Sigue siendo el hombre más sabio bajo el Sol.

¡Paren las prensas!   Acabo de enterarme que el odio de Jackson a Mayol viene de antes.   Con lo que comprueba que todo es la excusa buscada hace meses para PURGARLO y a todo lo que queda de VERDADERA IZQUIERDA.   ¡LEAN!
EL LADO OSCURDO DE LA IMBECILIDAD